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Brasil admitió ayer tácitamente que pudo haber irregularidades en la llegada a Brasilia del senador Roger Pinto, quien según un legislador contó con la complicidad oficial brasileña para burlar a las autoridades de La Paz y huir de su país.
Pinto llegó a la capital brasileña ayer y fue recibido por el senador Ricardo Ferraço. Actualmente se encuentra alojado en su vivienda particular, según informaron algunas fuentes oficiales.
La Cancillería brasileña divulgó un comunicado en el cual dijo que fue "informada" ayer de la llegada de Pinto al país. La nota indica que ese despacho investigará las "circunstancias" en las que el senador Pinto salió de la embajada y llegó al país, pese a no contar con el debido salvoconducto del Gobierno boliviano.
La Cancillería brasileña "está reuniendo elementos acerca de las circunstancias" en que Pinto llegó al país y además ha llamado para consultas al encargado de negocios en La Paz, Eduardo Saboia, a fin de que preste "esclarecimientos", explica el comunicado. El embajador Marcel Biato estaba fuera de Bolivia cuando ocurrió el hecho.
Agrega que se "abrirá una investigación" y "se tomarán las medidas administrativas y disciplinarias que correspondan”.
“Se está reuniendo elementos acerca de las circunstancias en las que se verificó la salida del senador boliviano de la Embajada brasileña (en La Paz) y su entrada en el territorio nacional”, señala un comunicado oficial.
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